Le quise tanto que no entiendo cómo ni porqué me enamoré.
Recuerdo la melodía, aún suena en mi cabeza.
Recuerdo los pasos, el camino andado, pero no la chispa.
No entiendo qué pasó, ni cuándo ni cómo.
Ahora me habla y no siento nada.
Puede que un poco de nostalgia, si acaso, pero casi siempre nada.
No hay hueco para él en mi vida.
Finito. Acabado.
1 comentario:
dIOS MÍO, CÓMO TE ENVIDIO, QUÉ SUERTE QUE SEAS CAPAZ DE TENER TAN CLALAS LAS COSAS... SÉ QUE TODO TE IRÁ BIEN, MIENTRAS SIGAS SIENDO ASÍ.
UN BESITO
Publicar un comentario